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Foto del escritorOutlander CSO

La batalla de Culloden

Actualizado: 7 dic 2018


El príncipe Carlos huyó en mitad de la batalla y murió en Roma en 1788. Su padre había fallecido en la misma ciudad en 1766. El último descendiente directo de la línea Estuardo, el cardenal Enrique Benedicto, hermano del príncipe Carlos, murió en 1807. Así, la dinastía Estuardo llegó a su fin como también los levantamientos jacobitas, luego de más de medio siglo con enfrentamientos en Inglaterra, Escocia e Irlanda. Estas revueltas tuvieron como consecuencia la emigración masiva de escoceses, conocidas como las Highlands Clearances, hacia las Tierras Bajas y América.

Por su parte, la prohibición de los símbolos culturales de los clanes promulgada mediante el Acta de Prescripción finalizó con la intervención del escritor escocés sir Walter Scott, quien narró algunos episodios de estos levantamientos en alguna de sus novelas. En Waverley realiza una vívida descripción de la batalla de Prestonpans, y en Rob Roy cuenta la vida de este héroe escocés que participó en el levantamiento de 1689, y que fue gravemente herido en la batalla de Glen Shiel de 1719. Otro gran escritor escocés, Robert Louis Stevenson, vincula dos de sus novelas al levantamiento de 1745, Secuestrado y The Master of Ballantrae. Como último ejemplo literario de estos hechos históricos, Diana Gabaldon sitúa los acontecimientos de su saga Outlander (en español, Forastera) también en estas fechas.

Escoceses patriotas, británicos descontentos, actos de gran valor, errores tácticos y muchos relatos inspiradores, los años de devastación de las guerras de los siglos XVII y XVIII son un capítulo complejo y bien conocido de la historia escocesa.

Si bien se idealizaron en las canciones y los relatos, los levantamientos jacobitas fueron mucho más sombríos, marcados por revueltas, insurrecciones y batallas tan sangrientas como divisorias. No lograron restaurar a los Estuardo al trono, y condujeron a la trágica batalla de Culloden que cambió para siempre a las comunidades y la estructura de las Highlands.

El príncipe Carlos llegó a Escocia el 5 de septiembre de 1745. Convocó a los antiguos jacobitas en Glenfinnan y, a pesar de que la convocatoria no tuvo demasiado éxito, empezó a marchar hacia el sur, hacia Edimburgo, aumentando su ejército a medida que la voz se corrió por las Tierras Altas. Edimburgo fue reconquistada y las fuerzas escocesas infringieron una derrota decisiva a los ingleses en la batalla de Prestonpans (21 de septiembre de 1745). Bonnie Prince Charles instaló su corte en el palacio de Holyrood (el castillo de Edimburgo nunca fue recuperado) donde intentó convencer a los jefes de los clanes que con el apoyo francés era posible una revuelta a nivel nacional. El 8 de noviembre entró en Inglaterra con unos 5.000 hombres. Varias ciudades cayeron en sus manos. Sin embargo, a los informes sobre dos batallones liderados por los generales Wade y el duque de Cumberland que se aproximaban, se sumaron otros, falsos, sobre un tercer ejército que se cernía sobre ellos, y el retraso en el desembarco francés, hicieron que los generales jacobitas le aconsejaran la retirada con el fin de reorganizarse, a lo que accedió el 6 de diciembre. El duque de Cumberland lo persiguió por casi toda la isla.

Culloden fue más que una batalla, fue la masacre del ejército jacobita a manos del ejército británico comandados por el duque de Cumberland (hijo menor de Jorge II de Inglaterra) creando luego un desierto en las ricas tierras escocesas.

Fue la última batalla (16 de abril de 1746) del último levantamiento jacobita de 1745, y supuso la derrota definitiva de las pretensiones al trono de Carlos Eduardo Estuardo (Bonnie Prince Charlie), hijo de Jacobo III.

El ejército jacobita, aproximadamente 5.400 hombres, estaba formado en su mayoría por los clanes de las Highlanders.



Llegaron al páramo de Culloden, situado al este de Inverness, tres días antes de la batalla. Estaban cansados y hambrientos. Pasaron varias noches a la intemperie, durmiendo sobre el suelo húmedo y frío (terreno de turba). La mayoría portaban armas rudimentarias y no eran un ejército debidamente entrenado. Tenían problemas de coordinación ya que cada uno obedecía las órdenes del jefe de su clan. Además, el príncipe Carlos decidió tomar el mando directo de las tropas sin tener formación militar.

Por su parte, el ejército inglés tenía alrededor de 8.000 hombres formados por expertos soldados bien aprovisionados.

La mañana del 16 de abril de 1746 fue fría, ventosa y lluviosa. El ejército inglés levantó su campamento en Nairn al amanecer, llegó a Culloden y formó dos filas ordenadas.

El ejército jacobita formó a las tropas en dos líneas: la frontal de exhaustos soldados (la noche antes intentaron un ataque nocturno al campamento británico quedándose a unos 3 km de Nairn al despuntar el día por lo que se vieron obligados a retroceder y dispersarse en busca de comida y algo de sueño) y la segunda constituida por los regimientos de caballería y dos destacamentos de soldados franceses.

Los ejércitos quedaron enfrentados, separados por menos de 1 km. de páramo cenagoso. Comenzó el fuego de artillería y la mayoría de las bajas se produjo en estos primeros minutos. Los jacobitas contaban con dos cañones y no les quedó otra opción que cargarlos por lo que muchos fueron abatidos incluso antes de entrar en combate.

Alrededor de 600 hombres consiguieron atravesar la primera línea del ejército británico, pero quedaron atrapados entre la primera línea de casacas rojas y la segunda, y en pocos minutos fueron aniquilados.

Durante la primera media hora de batalla, la artillería británica (superior en número y técnica) se dedicó a machacar las líneas jacobitas a placer mientras el príncipe Carlos se encontraba por detrás de su ejército para no caer víctima del enemigo.



La batalla terminó en una hora. Los que no murieron bajo el fuego de los cañones, lo hicieron bajo el fuego de los mosquetes o insertados por las bayonetas. Los muertos fueron enterrados en fosas comunes, los que huyeron fueron perseguidos y matados, y los prisioneros fueron fusilados, ahorcados o enviados a las colonias como esclavos.

La crueldad de las tropas al mando de Cumberland apodado “El carnicero” fue tal que ningún ejército ha reclamado hasta el día de hoy la victoria de la batalla de Culloden.

Las fuerzas británicas sufrieron tan solo unas 50 muertos y 300 heridos.

El príncipe Carlos logró escapar y huyó de Gran Bretaña a Francia, disfrazado de una doncella irlandesa al servicio de Flora MacDonald.

La persecución continuó los meses siguientes en el terreno legal: se destruyó el sistema de clanes mediante el Acta de Prescripción: se promulgaron leyes para erradicar el sistema feudal de clanes, se prohibieron las gaitas y la vestimenta tradicional fue declarada ilegal; se prohibió toda religión que no fuera la protestante; hubo persecuciones indiscriminadas, robos, saqueos y asesinados a sangre fría por parte de grupos de soldados; muchas familias se vieron obligadas a emigrar a América para sobrevivir y subsistir. También se construyeron más fortificaciones y carreteras para controlar a la población. Fue el fin de la cultura de los clanes tal y como se conocía hasta entonces.



Hoy en día sobrecoge ver una gran extensión de tierra rasa y desabrigada. Desperdigadas por el páramo se encuentran unas piedras grabadas con los nombres de los clanes que son las fosas comunes donde se enterraron los cuerpos de los highlanders.

Gran parte de Culloden Moor, entonces llamado Drummossie Muir [Lowlands], a unos 500 pies sobre el nivel del mar entre el río Nairn y la llanura costera al noreste de Inverness, ha sido adquirido por el National Trust for Scotland. En el Memorial Cairn de 1881 creado por un descendiente del Lord Advocate Duncan Forbes (1685-1747), se celebra una ceremonia conmemorativa cada 16 de abril.

Licia López de Casenave

Bibliografía

https://www.escociaturismo.es/los-levantamientos-jacobitas/

https://www.visitscotland.com/es-es/about/history/jacobites/

https://pilardescalza.blogspot.com/2016/04/batalla-de-culloden.html

https://www.electricscotland.com/canada/fraser/culloden.htm


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